Durante los meses de mayo y junio de 2020, entre el miedo, la incertidumbre y las explicaciones de las fases nos pusimos manos a la obra para diseñar la campaña de pastoral para el curso 20-21. Todos teníamos en mente que tenía que ser algo positivo, que nos ayudara a salir de los miedos del confinamiento y a mirar el mundo con ojos nuevos. Así que nos decidimos por el lema «Algo nuevo está brotando» (Is 43, 19).

Cuando me puse a pensar en los elemento gráficos tenía claras dos cosas; por un lado los colores, que tenían que ser muy suaves para contrastar con los miles de carteles que habrá en todos los lugares con indicaciones, recomendaciones y prohibiciones, en estos carteles suelen predominar los rojos, los azules y los amarillos, así que me decanté por una paleta pastel que tampoco debía recordar a los «arco iris» que los niños habían dibujado durante el confinamiento y puesto en sus balcones con el lema «todo saldrá bien»; Por otro lado las tipografía seleccionada tenía que ser también «suave» con el fin de evitar la rectitud de una tipografía formal y que recordase a las normas.

Manos a la obra, lo primero que hice fue diseñar el logo de la campaña. La combinación del brote que surge y las letras debían formar un conjunto que fuera agradable a la vista, y que evitar en exceso mostrar una línea muy larga, resuenan dos palabras sobre el conjunto, «Nuevo» y «Brotando», como ideas fundamentales que deben quedar fijadas en el espectador.

Este logo sirvió para diseñar los primeros materiales por parte de los equipos y empezar a dar unidad gráfica a todo el trabajo hecho por más de un centenar de personas preparando reflexiones, buenos días, celebraciones,…

El elemento principal es el brote surge de la tierra que se rasga para dar una nueva vida, con líneas sencillas, rectas las del suelo y curvas las del brote, trato de mostrar el contraste entre la dureza de nuestros corazones y la belleza y la sinuosidad de la vida que nace dentro de nosotros. Al igual que en el logo el brote debía de ser el elemento principal debía de estar también en el cartel (o imagen) de la campaña.

En el cartel el brote surge del asfalto de una ciudad vacía de coches, como los días del confinamiento, pero llena de personas, de vida, que se muestra en los amigos, la chica que salta o el padre que va al cole con su hijo. La ciudad nos muestra dos caras la de la calle, una calle que todos añorábamos y la vida en casa; varios personajes hacen distintas acciones, contemplan, rezan, leen, tocan la guitarra,… los días en casa durante el confinamiento nos tienen que ayudar a mirar la ciudad con otros ojos, porque algo nuevo está brotando, somos constructores de una nueva humanidad.

En la ciudad no estamos solos, un sol, imagen de la luz, nos recuerda el calor de Dios a pesar del frío de nuestros miedos, un chico con camiseta del mismo color lo contempla. Una iglesia, de fondo, es símbolo de la comunidad que mutuamente se acompaña y hace suyas las palabras de Francisco, «de esta situación no podemos salir solos».

Espero que estas indicaciones del proceso creativo puedan ayudar comentar y crear reflexiones, celebraciones y materiales en cada una de las casas. Como cada año han sido semanas de trabajo intenso y de probar muchas cosas, espero el resultado guste, y sobre todo ayude los niños y jóvenes a descubrir que «algo nuevo está brotando». Aquí os dejo el resultado en varios formatos y lenguas, en la web de la inspectoría «Santiago el mayor» está todo lo demás.