narrraluz27

 

Que sí. Hazme caso. Necesitas una manita de pintura… A todos nos pasa y tú no vas a ser menos. Lo mejor es darse cuenta y no dejar que el tiempo acabe por agrietar aquello que, a la postre, es lo que hace que la vida valga la pena.

No lo dejes pasar ni un minuto más. Hay cosas que no deben esperar si no quieres acabar siendo la sombra de lo que Dios pensó para ti. Busca las herramientas que necesites y ponte el mono de trabajo. Es hora de remangarse. Este tipo de reformas se sabe cuándo empiezan pero no cuándo terminan. Requieren tiempo y paciencia. Y mucho tesón. ¡Y valentía! Al fin y al cabo, ponerse delante de lo que uno es y contemplar las imperfecciones, los desconchones, las consecuencias de haber estado expuesto tanto tiempo al sol, a la lluvia, al viento… no es un ejercicio sencillo. Pero quién no se la juega, no gana.

Pero ¿sabes qué es lo mejor? Que quien tanto te ama, te sostiene. ¡A por ello!

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *