He tenido la suerte de conocer a muchas personas que han hecho de la escucha una forma de vida. Estoy agradecido. De todas he aprendido.
Después de 10 años trabajando en lo social me doy cuenta que es una actitud fundamental y cada vez me dan más pena aquellos que solo usan la palabra para decir sin decir.
marzo2015-02
Hoy os presento a María* una buena amiga con la que comparto desde hace años situaciones varias. Educadora por vocación y al servicio de los jóvenes sobre todo de los más necesitados. Como podéis ver en la primera parte de la imagen no sale ella por completo y su rostro se ve difuminado al fondo. Una oreja ocupa el primer plano. La razón es muy sencilla, si algo he aprendido de María es su capacidad de escucha y dar un palabra oportuna en un momento determinado. De ahí la oreja y la boca que aparecen en la cubierta. Ambas son una metáfora muy válida de lo que este número quiere expresar. La Pastoral de la misericordia se hace efectiva en muchas situaciones, a veces toca curar, a veces consolar, a veces pedir perdón, y a veces escuchar y esto lo hacemos menos.

marzo2015
En situaciones complicada el propio reconocimiento de saberse herido es fundamental y para ello es necesaria la escucha atenta por parte del otro. Una escucha que no juzgue, que posibilite al otro expresarse y manifestar su propia limitación. En ocasiones este es un paso previo y necesario. Después ya vendrá la palabra oportuna, clave puede también ayudar a reconfigurarnos con nosotros mismos.
Estas imágenes nos puede ayudar a nuestra participación “activa” en una pastoral de la misericordia, pero también para una trabajo propio, interior, con uno mismo. Un paso previo para el perdón es saberse pecador, reconocer en el otro la necesidad de amor es mucho más fácil que cuando uno ha hecho esa experiencia en primera persona. Lo demás son teorías, fórmulas impersonales, sin corazón, sin vida. Por eso te animo a que te escuches, a que escuches lo que otros dicen de ti, a reconciliarte contigo mismo antes. Antes de hablar, escucha. No hay nada como el calor humano, la escucha atenta y la palabra oportuna. ¿te apuntas?
marzo2015-01

** María es un nombre ficticio y representa a todos los educadores/as, trabajadores sociales y psicólogas con los que he compartido estos últimos 10 años y me han enseñado que la escucha es la clave en la educación.

Publicado en : Misión Joven

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