– ¿No te cansa estar continuamente aprendiendo?
– La verdad es que no. Aprender es mejor que un café cargado por la mañana. Hace que me sienta vivo, que sienta que aún queda camino por recorrer, que no puedo bajar los brazos…
– Buff… ¿Y la tranquilidad de saber que ya has llegado, de sentirte seguro, de reposar en lo que ya has hecho?
– Yo no quiero reposar… ¡Y menos vivir seguro! La vida es novedad, cambio, movimiento, emoción, imprevisto. Cuando algo se para, se muere.